Voy a presentaros a la Clínica Veterinaria Merbru, y como llegamos en ella a la homeopatia para animales.
Nuestra clínica se abrió en Agosto de 1989 con gran ilusión y ganas de trabajar, montada con todos los servicios y equipamientos necesarios.
Dos años después de su apertura me encontré, por decirlo de alguna manera con la Homeopatía debido a una enfermedad que contraje vacunando ovejas, “la brucelosis” o como se llama comúnmente fiebre de malta y de la cual recaí.
En mi segundo tratamiento, la homeopatía me hizo llevar la enfermedad sin los efectos secundarios del tratamiento antibiótico y a no recaer de nuevo, me encontraba bien.
Fué entonces cuando decidí conocer y estudiar la homeopatía; y asistí a una conferencia que organizó un conocido laboratorio en Alicante, para veterinarios. Como es normal, éramos pocos los interesados por este tema, y más aun en aquella época que ni se conocía lo que era la homeopatía.
Esta conferencia me motivó a seguir estudiando esta forma de terapéutica que no tiene efectos secundarios. También allí descubrí la importancia que tiene la frase que decía mi bisabuelo medico en Puçol y que la familia repite a lo largo de las generaciones “no hay enfermedades, sino enfermos”.
Para dar tratamiento homeopático es muy importante conocer la forma en que se manifiesta la enfermedad, un ejemplo, en humanos hay personas que buscan el calor, otros quieren la ventana abierta, otros estar solos, otros buscan la compañía……y todos ellos tienen fiebre.
Seguidamente me apunte al ciclo de enseñanza de dos años que ofrecía el colegio oficial de Médicos de Valencia dos años, todos eran médicos menos yo, que era la única veterinaria. Tras acabar y examinarme obtuve el Diploma de terapéuta homeopática el 25 de Noviembre de 1994.
Al acabar éste ciclo, empezó otro, este se impartía en Zaragoza a nivel europeo, el IAVHA (International association for veterinary Homeopathy) también de dos años, con la diferencia de que era solo para veterinarios, tras examinarme obtuve el diploma con fecha 14-12-1997.
En este curso encontré a más veterinarios que, como yo, mostraban interés por otras formas de tratar la enfermedad, allí me sentí arropada y con un ambiente fantástico, donde conocí a compañeros con los que mantengo aún hoy en día una gran amistad, y con los que coincido en alguno de los cursos que sigo haciendo para avanzar en el tema.
La Homeopatía ha hecho que enfoque la enfermedad de una manera mas holística, y vea al individuo en su totalidad, no por partes.
También me ha mostrado la posibilidad de ampliar mi forma de tratar las enfermedades ofreciéndome una herramienta nueva que incorpore a la tradicional en mis tratamientos, es decir puedo tratar a cada uno como que pienso que es mejor, tanto con la terapia alopática tradicional como con la homeopática, pues mi fin es curar o dar calidad de vida a un animal.
Agradezco a los clientes que me buscan para intentar dar más calidad de vida a sus pacientes y evitar o paliar los efectos secundarios de su tratamiento.
A lo largo de los años, la práctica diaria te enseña que un cuidado correcto de la mascota evita muchos problemas, con esto quiero decir desde pequeñas complicaciones a enfermedades incluso graves.
En esta clínica nos basamos en atender a los animales con cariño, honestidad y con un enfoque de prevención y para así evitar problemas futuros.
Hay cuatro pilares básicos con los que el dueño puede dar un cuidado en casa como prevención:
– Alimentación
– Oídos
– Boca
– Tratamiento antiparasitario.
Nos gusta asesorar a nuestros clientes sobre estos temas, para que luego sepan hacer un buen manejo de ellos.
Este es nuestro enfoque en la clínica.