Como gestionar la incertidumbre en el mundo actual  

El mundo, nuestro alrededor, todo cambia a una velocidad de vértigo. Todo va demasiado deprisa por lo que la gestión de la incertidumbre nos plantea un verdadero reto. Nuestro día a día fluctúa, no es estable, ni previsible y hemos de tener la capacidad de aceptarlo y adaptarnos al frenético ritmo que nos marca el momento actual.

A pesar de ello, todos tenemos una idea de como nos gustaría que fuera nuestra vida y con ello nos generamos una serie de expectativas. El trabajo, la familia, la pareja, el tiempo de ocio, incluso nuestro cuerpo, trazamos un guión mental de como queremos todo … Pero, como decía Lennon, “la vida es aquello que nos pasa, mientras hacemos otros planes”

La gestión de la duda

Se hace cada vez mas necesario aprender a convivir con el cambio constante, y eso requiere de grandes habilidades para gestionar la incertidumbre de la manera correcta. Lo que siempre debemos tener claro es que la duda forma parte de nuestra vida. Nada es seguro ni para siempre y que la incertidumbre está y estará siempre. No podemos tener todo bajo control y debemos aprender a vivir con ello.

Te gustará leer: ¿Qué puedo hacer para estar bien?

Claves para la gestión la incertidumbre

En una sociedad que funciona a ritmo de imprevisto, se nos empuja a tenerlo todo controlado  y atado. Obviamente eso nos genera incertidumbre, la podemos definir como falta de certeza, confianza o seguridad sobre algo futuro…¡cómo no nos va a provocar sensación de inquietud, ansiedad o miedo!

Si a este explosivo cóctel le añadimos la tendencia a querer controlar situaciones que están totalmente fuera del alcance de nuestro control, no es de extrañar que, en ocasiones, la angustia se apodere de nosotros.

Te puede interesar:  Aceptación o no aceptación. Consonancia VS disonancia,

La tercera de las 7 Leyes Universales que rigen el Universo y a quienes lo habitan es la Ley de Vibración o de movimiento y dice: Nada esta inmóvil, nada es permanente. Todo se mueve, todo vibra. Aún así muchas veces nos empeñamos en obviar este detalle…

¿Que podemos hacer entonces para gestionar la incertidumbre?

Guía definitiva para gestionar la incertidumbre

¿Puedo cambiar esta situación?

Si la respuesta es afirmativa valora tus opciones, escoge una de ellas y céntrate en lo que puedes hacer. Si es negativa suelta inmediatamente esa situación, acepta que no puedes hacer nada mejor y espera a que el futuro se convierta en presente. No podemos influir en algo que no depende de nosotros directamente, nos hará perder energía y preocuparnos innecesariamente.

Artículo relacionado: Claves para lograr mis objetivos

Sé objetivo

Observa la situación desde afuera, valora la situación como si no fuera contigo, como si fueras un espectador en lugar del protagonista. Intenta valorar como te sentirás cuando hayan pasado 10 años y eches la vista atrás ¿tenían sentido esas dudas? ¿qué preocupaciones son realmente importantes?

Acepta la duda

Acepta que no puedes saberlo todo. Muchas veces jugamos a los adivinos y queremos conocer todas las posibilidades. Tienes que aceptar que no conoceremos el futuro hasta que llegue y que lo que sí tenemos a mano y podemos cambiar es el presente. Si tienes que escoger elige aquella opción que te haga sentir mejor.

Haz caso a la intuición

No suele fallar. Un gran porcentaje de nuestros procesos internos son inconscientes. Muchas veces actuamos por impulsos y solemos acertar por norma general. No pienses tanto y empieza a trabajar desde el corazón, te guiará bien. El cerebro suele ir “de listo” y, aunque es muy útil, también puede ser muy retorcido.

Te puede interesar:  Subir la autoestima rápidamente

Lee también: Desafía tus pensamientos

Diseña un plan

¿Quién sabe? ¿Y si sucede? Por si crees que hay muchas posibilidades, por si aquello que piensas que puede pasar y te tiene en vilo, pasará de verdad. Ya que estamos actuando desde aquello que podemos hacer, nos dará mayor sensación de tener el control, y ganaremos tranquilidad.

Agradece

Centra la atención y la intención en agradecer lo que tienes y lo que vives, por poco y sencillo que tu mente te diga que es. Céntrate más en eso que en lo que te falta. Cuando sufres una perdida importante (salud, amigo o familiar, trabajo, etc), es cuando te das cuenta de su valor. ¿Por qué no celebrarlo en la vida cotidiana y tenerlo presente cuando se tiene?

Información y preparación

Tener los máximos conocimientos sobre la situación que nos preocupa. Todo es aprendizaje. Como bien dice el refrán “El saber no ocupa lugar” y en cualquier momento, nos puede resultar útil.

Vive en el presente

Enfócate en estar en el aquí y ahora .Está muy bien ponerse metas y marcarse objetivos pero no podemos dejar de mirar nuestros pies y dónde estamos pisando en cada momento.  Presta atención a aquello que está pasando mientras está pasando, en el momento presente. Valora lo positivo que hay ahora en tu vida. Si te centras solo en el futuro puedes acabar tropezando con los obstáculos que te plantea el camino.

Lee también: Tranquilo ahí arriba ¡vive el presente!

Detecta y gestiona tus emociones

Observa y detecta tus pensamientos, trabaja en tu ansiedad y miedos. Date permiso para sentir lo que sientes, pero no lo arrojes contra quien no se lo merece. Practica técnicas de relajación, la respiración consciente y la meditación te ayudarán a detectar los pensamientos que te generan ansiedad. Una vez detectados cuestiona su veracidad e importancia.

Te puede interesar:  Vampiros energéticos conscientes (última parte)

Sé flexible como un junco.

Acepta la posibilidad de equivocarte y no te exijas demasiado a ti mism@. Confía en tus recursos y capacidades para afrontar las situaciones. La autoconfianza te ayudará a encontrar  soluciones y tomar decisiones adecuadas.

Te puede interesar este libro: Los cuatro libros, Confucio

Constancia

Si has tomado una decisión mantente firme y no vayas hacía atrás. Sé perseverante, te hará aprender y te dará recursos para reponerte ante posibles contratiempos. Todo lo aprendido te convertirá en una persona segura de si misma

Carl Jung decía que “Aquello a lo que te resistes, persiste. Aquello que aceptas, se transforma”.

¿Has leído el Libro Rojo de Carl Jung? Totalmente recomendable

Confucio decía “Si los problemas tienen solución, ¿de qué te preocupas?. Y si no la tienen, ¿por qué sigues preocupándote?”.

Sabemos que en determinadas situaciones que nos plantea la vida no es  nada fácil permanecer inmutable y no preocuparse, pero también sabemos que si dejamos que la situación se adueñe de nosotros nos hará sentirnos peor, nos paralizará y nos impedirá disfrutar de cosas maravillosas. Y eso no es una solución.

Artículo anterior¿Difusión o inhalación de Aromaterapia? ¿qué es más efectivo?
Artículo siguienteCómo influir naturalmente en el metabolismo

 

Maestra certificada para la enseñanza del yoga por Viniyoga Escuela de Formación
Segundo grado de Reki Sistema Usui por la Asociación de Servicio Reiki
Formación en SEO y Marketing Digital
Curso de Inteligencia emocional en Inteligencia Emocional y Coaching
Instructora de Hatha Yoga y Vini Yoga

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí