Objetivos: ¿en qué «dimensión» los fijas?

¿Existe otra dimensión? ¿Qué es “otra dimensión”?

0
1419

¿Eres de los que buscan frases motivadoras que te ayuden a fijar tus objetivos? En este artículo Gaspar Vera nos ofrece una serie de pautas para conseguirlo.

¿Has contestado ya a la pregunta del título de este post? ¿O no sabes a que me estoy refiriendo? ¿Existe otra dimensión? ¿Qué es “otra dimensión”?

Pues bien, existen infinitas dimensiones en el mundo, tantas como interpretaciones podemos o queremos darle a las cosas. También tantas como las demás personas quieran o puedan darle a la misma situación. Por este motivo te preguntaba si conocías en que dimensión situabas tú tus objetivos.

La finalidad del título era, principalmente, generarte la primera duda ya que en muchas ocasiones tenemos ideas fijas e inamovibles o interpretaciones cerradas de la realidad, sin pararnos a pensar, que es solo nuestra realidad pero que puede, de hecho las hay, haber otra muchas realidades. O mucho más sencillo, las cosas pueden ser vistas y enfocadas desde muchos prismas distintos.

En el tema de nuestras METAS es de suma importancia, no solamente en que “dimensión, las situamos sino que “dimensión” le damos. Dependiendo de donde las situemos respecto a nosotros y que forma les demos será más fácil o más difícil conseguirlas. Y si hay algo cierto es que todo el mundo quiere conseguir sus objetivos. Y a poder ser de la manera más accesible y asequible posible. Con eso no te estoy diciendo que con un simple cambio de enfoque vayas a conseguir lo que te propongas al momento, pero sí que será de gran utilidad en tu estrategia.

Vamos a ello y a ver algunos ejemplos de cómo dar una dimensión favorable a nuestras metas.

Vamos primero a la imagen visual que tenemos de nuestro objetivo. Primero pregúntate donde sitúas tus metas respecto a ti. Pregúntate si sitúas esa meta cerca o lejos de ti. Puede ser que te cueste visualizarlo, en este caso, te recomiendo que cierres los ojos y te imagines frente a ti aquel objetivo que quieras conseguir. Dale una forma (de lo cual hablaremos a continuación) y dime si lo ves lejos o cerca. Si la vemos cerca será una gran ventaja para empezar y nuestro objetivo será acercarla aún más. Acercarla hasta que notes que mentalmente estas dentro de ella (estado asociado). Si por el contrario la vemos lejos el objetivo será el mismo (aunque puede que nos cueste un poco más). Cierra los ojos y ves acercando tu meta mentalmente a ti. Acércala más y más ya que solo tú tienes esa capacidad. Mentalmente nadie puede frenarte a acercar las metas. Cuando la tengas cerca, muy cerca, cógela, abrázala, entra en ella o da un salto que te lleve a su interior. Ya hemos conseguido un primer paso, ASOCIARTE CON TU OBJETIVO.

Vamos con el siguiente paso, la FORMA. Pregúntate que forma le das a tu meta, a tu objetivo. Normalmente las personas con mayor dificultad para conseguir sus objetivos dan una forma muy grande a los mismos. En muchas ocasiones gigantesca. Por ponerte un ejemplo claro recuerda cuantas veces has oído lo que le ocurre al futbolista que va a chutar un penalti; Ve al portero enorme. Y por el contrario el portero siente que está bajo una portería gigantesca. ¿Es eso cierto o es una interpretación de cada una de las realidades? Por lo tanto el objetivo tuyo ahora es darle una forma realista o que sea favorable a tu mente para que esta vea la meta como un aliado y no como un gigantesco adversario. El aliado va junto a nosotros y por norma general tiene un mismo tamaño mental. El adversario, por el contrario, siempre lo situamos frente a nosotros. Te invito a que juegues con esto y le des la forma a tus metas que más te interese.

Nuestro siguiente paso es saber las sensaciones que nos produce pensar en el camino que nos toca recorrer para conseguir nuestra meta. Ojo y matizo que son las sensaciones que nos produce imaginar el camino y no las sensaciones que sentimos al pensar en la meta. Pensar en la meta siempre nos dará buenas sensaciones pero es durante el camino donde tenemos que desarrollarnos al máximo para alcanzar lo que queremos. Y es durante el camino, precisamente, que muchas personas tiran la toalla. Dibuja un camino que te lleve a un “agradable estado kinestésico”. Me explico, si pensamos que el camino será duro, cuesta arriba, difícil y de mucho sacrificio las sensaciones que tú mismo estás generando A TU MENTE y por tanto también a tu cuerpo son sensaciones negativas. Lo que en PNL llaman K-. Si por el contrario piensas en un camino transitable, lleno de experiencias, retos, auto-superación, de pequeños logros, estas diciéndote lo mismo pero generando unas sensaciones completamente distintas. Diría yo que motivantes y retadoras. Generando lo que en PNL llaman K+.

¿Qué te parece? ¿Potente verdad? Te invito a que lo pruebes y analices los resultados. Empieza por retos no muy “complejos” y ves aumentando el nivel de dificultad a medida que te sea más fácil cambiar la DIMENSIÓN de tus metas.

¿MATRIX?

Artículo colaboración de saludatecoaching.

Imagen: www.pepinis.com

Artículo anteriorTai chi, Cuento zen.
Artículo siguienteRolfing ¿En que consiste?

Facilitador de formaciones de ALTO IMPACTO y Experto en Liderazgo Inteligente y Motivación para el éxito de las personas. Facilitador del desarrollo personal y empresarial desde un Liderazgo que apuesta por la suma de talentos.

Autor del libro: De espectador a protagonista

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí