Si queremos saber como ser feliz probablemente la clave es ser flexible. Crear barreras asfixiantes nos dificultará tener una vida plena y llena de satisfacciones. Tenemos que conseguir liberarnos de esquemas mentales rígidos. La felicidad la conseguiremos con estrategias flexibles y liberadoras. Si estás en un momento de tu vida en que necesitas un cambio, te liberalizarás al romper con los propios esquemas.
Intentamos imponer a los demás nuestras ideas, tenemos la sensación de que tenemos razón, no conviene saltar la línea de ofuscarse por ello. Cambiemos la idea de «cómo convencer a los demás», cada uno que piense lo que quiera, el tiempo dirá quién tiene razón.
Ser flexible no significa doblegarnos ante los demás o ante los imprevistos de la vida. Ampliemos nuestras perspectivas, ahí se abrirán más oportunidades. La vida, cuando nos deprendemos de nuestras rigideces, se vuelve mucho más placentera. Veremos más tonalidades constructivas del mundo.
¿Cómo conseguir ser flexible?
Lo primero que tenemos que hacer es no juzgarnos, pero ser conscientes de nuestros logros. Cuando estés de bajón recuerda cómo empezó el proyecto y por qué empezaste la aventura. Mira todo lo conseguido, si abandonas, se perderá en el camino. Conviene redefinir el propósito para mejorarlo. Las necesidades y circunstancias cambian constantemente. También son una buena ayuda la psicología positiva y la meditación.
Tenemos que conseguir tener una mente ágil, tolerante y receptiva. Cambiando de mentalidad, asumiendo el rumbo de nuestra vida sin la necesidad de tener siempre la razón. El mundo no se centra con certezas implacables. Evitemos querer tener todo bajo nuestro control y no es necesario convencer a nadie de nuestras convicciones. Queremos que la vida funcione a nuestra medida. Todos los días no van a salir soleados por mucho que nos empeñemos.
Debemos cambiar lo cabezones que somos. Siempre nos pensamos que son los demás los inflexibles. Hay gente que es de un partido político y aunque hagan algo imperdonable, lo defienden a muerte.
Aprendamos a reforzarnos a nosotros mismos. Si conseguimos perdonarnos, rebajar nuestras autoexigencias y no culpabilizarnos, las situaciones externas de rebote no nos afectarían tanto. Convirtamos lo agobiante en cómodo.
Ser flexible con los demás no significa ser sumisos ni doblegarnos. Significa, de entrada, respetarnos. Y a partir de aquí, a veces, llegar a entendernos.
Para muchos resulta complicado entendernos los unos con los otros. Cada uno tenemos nuestra verdad, que nunca acaba de encajar con la de los demás. Evitemos las armaduras de certezas chocando entre nosotros.
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Cinco características que poseen nuestras certezas
Nuestras certezas son relativas, rígidas, limitadas, invisibles y blindadas. Con este artículo intentaré explicar lo ridículo que es a veces enfadarse por mantener nuestro convencimiento.
Nuestros pensamientos son relativos. Dependiendo de dónde nazcamos tendremos un punto de vista. Incluso de la religión mayoritaria de nuestro país. No es lo mismo nacer en un país en guerra que en un país donde disfrutamos de la playa y de las vacaciones.
Las convicciones también son rígidas. La vida no es siempre buenos o malos, blanco o negro. Tenemos la capacidad de matizar, pero a nuestro cerebro le gusta las cosas claras y ordenadas. Las neuronas no se encuentran cómodas con los matices que nos impiden encasillar, tener todo ordenado.
La mayoría de los razonamientos son limitados. Las personas no vemos las limitaciones de nuestro cerebro. Nuestras neuronas no pueden entender algo que no han visto antes. Por ello, la ciencia siempre hace dibujos para que la explicación sea más didáctica.
Nuestras certezas son invisibles. Los valores y creencias no se aprecian a simple vista. También suelen estar blindadas. Por ejemplo, cuando una persona confía en su pareja y esta le es infiel, suele ser la última en enterarse. O incluso los niños no dudan de los Reyes Magos aunque se nos escape que nos vamos a comprar los regalos.
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«Ser flexibles no significa ser sumisos ni doblegarnos». Excelente artículo. Gracias.
Gracias por el comentario, nos alegramos que te guste.