Mejorar la apariencia y la salud es una las principales razones por las cuales las personas suelen someterse a un procedimiento quirúrgico. Una de las cirugías plásticas más realizadas es la rinoplastia, pues esta llega a producir un cambio bastante evidente en la apariencia de la persona.
Sin embargo, realizarse una rinoplastia en Madrid no es cualquier cosa. Es importante que antes de la cirugía se conozca qué es una rinoplastia, cuándo se debe hacer, los riesgos y tipos. Estos aspectos podrás conocerlos a continuación.
Qué es la rinoplastia
La rinoplastia es una cirugía en la cual se modifica la forma que tiene la nariz. Mediante esta operación se pueden corregir diferentes partes de la nariz como: la piel, el hueso y el cartílago. Todo ello con el objetivo de lograr una armonía facial, es decir, que la apariencia de la nariz combine con las facciones propias de la persona.
Este procedimiento se puede realizar mediante anestesia local o general, un aspecto que será determinado según el área a tratar. Además, puede tardar entre 1 o 2 horas, aunque en algunos casos este tiempo puede llegar a extenderse.
Cuando se va a planificar una rinoplastia, el médico tomará en consideración varios aspectos como: piel de la nariz, rasgos de rostro y los cambios que se desean realizar en este lugar. De esta manera, si eres un candidato para este procedimiento, el cirujano podrá crear un plan adecuado para ti.
Tipos de rinoplastia
Existen dos formas de realizar esta cirugía y son:
- Rinoplastia cerrada: es la técnica que prefieren utilizar los doctores y los pacientes, ya que no deja una cicatriz visible. Para modificar la nariz, se accede mediante las fosas nasales, lo que evita que se hagan incisiones exteriores.
- Rinoplastia abierta: en esta el cirujano realiza una pequeña incisión en la zona central de la nariz para poder acceder de manera sencilla a los huesos y los cartílagos de la misma.
Cuándo realizar una rinoplastia
Una de las causas por la cual se debe realizar una rinoplastia es la existencia de problemas respiratorios ocasionados en esta área. Problemas como la obstrucción por mucha tensión, desviación del tabique o malformaciones congénitas; pueden ser motivos para realizar una rinoplastia.
Sin embargo, también pueden realizarse con fines estéticos. Mediante este proceso se puede aumentar o disminuir el tamaño de la nariz, reducir la abertura que tienen las fosas nasales, cambiar el ángulo que hay entre la nariz y el labio superior, cambiar la forma que tiene la punta de la nariz o el puente nasal y corregir defectos o lesiones congénitas.
En el caso de realizar esta cirugía por motivos estéticos, los doctores recomiendan que la cirugía se realice sólo cuando el hueso haya terminado de crecer. En las mujeres esto ocurre alrededor de los 15 años, y en los hombres poco tiempo después.
Riesgos de hacerse una rinoplastia
Al igual que cualquier otra cirugía, la rinoplastia supone ciertos riesgos como hematomas, infección y/o sangrado. Además, la anestesia general puede causar reacción a medicamentos y algunos problemas respiratorios. También, existen otros riesgos que son:
- Deformidad del contorno de la nariz.
- Necesidad de realizar otro procedimiento quirúrgico en el futuro.
- Disminución de la respiración por medio de la nariz.
- Pérdida del soporte
- Aparición de puntos rojos por la ruptura de vasos sanguíneos.
Una rinoplastia es un procedimiento para modificar el tamaño, forma y proporción que tiene la nariz. El principal objetivo de esta cirugía es corregir aquellos problemas que afectan la respiración. Sin embargo, suele realizarse por razones estéticas.
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