El ayuno combinado con la vitamina C puede ser eficaz contra el cáncer
Una dieta que imita el ayuno podría ser más eficaz para tratar algunos tipos de cáncer cuando se combina con vitamina C. Así lo han determinado unos científicos italianos que realizaron un estudio sobre el cáncer colorrectal en ratones.
Existe un creciente cuerpo de evidencia que respalda el papel del ayuno tanto en el tratamiento, como en la prevención del cáncer. De hecho, algunas investigaciones sugieren que el ayuno ayuda a combatir el cáncer al reducir la resistencia a la insulina y los niveles de inflamación.
Por otra parte, algunos investigadores creen que el ayuno puede hacer que las células cancerosas respondan mejor a la quimioterapia mientras protegen otras células. El ayuno también puede estimular el sistema inmunológico para ayudar a combatir el cáncer que ya está presente.
La prevención del cáncer y su culpa dimensional
Prueba en ratones
En este sentido, recientemente, investigadores de la USC y el IFON Instituto de Oncología Molecular de Milán (Italia) han descubierto que la combinación de una dieta que imita el ayuno, más la suplementación con vitamina C, puede retrasar la progresión del tumor en múltiples modelos de cáncer colorrectal. El estudio se ha realizado, hasta el momento, solamente en ratones. Asimismo, los resultados apuntan que podría llegar a causar la regresión de la enfermedad en algunos ratones.
El autor principal del estudio ha sido Valter Longo, director del Instituto de Longevidad de la USC en la Escuela de Gerontología Leonard Davis. El experto ha indicado que “se ha demostrado por primera vez cómo una intervención completamente no tóxica puede tratar eficazmente un cáncer agresivo”.
Longo ha añadido que “durante la investigación se han tomado dos tratamientos que se han estudiado ampliamente como intervenciones para retrasar el envejecimiento”. Uno de ellos es la dieta que imita el ayuno y el otro tiene relación con la vitamina C. “Hemos combinado ambas para conseguir un poderoso tratamiento para el cáncer”.
Cuidar los sistemas inmunitario y respiratorio
Otras posibles alternativas
En el informe, publicado en la revista Nature Communications, los autores afirman que el ayuno puede ser una opción desafiante para los pacientes con cáncer. Sin embargo, subrayan que “es una opción más segura y factible una dieta baja en calorías, a base de vegetales que hace que las células respondan como si el cuerpo estuviera en ayunas”.
Los resultados de investigaciones anteriores sobre el potencial de la vitamina C para combatir el cáncer se han mezclado. Sin embargo, estudios recientes están comenzando a mostrar cierta eficacia, especialmente en combinación con quimioterapia. En este nuevo estudio, el equipo de investigación quería averiguar si una dieta que imita el ayuno podría mejorar la acción de lucha contra los tumores. Se le ha añadido vitamina C en dosis altas, con el fin de crear un entorno insostenible para las células cancerosas, mientras que sería seguro para las células normales.
“Nuestro primer experimento in vitro mostró efectos notables. Cuando se usa sola, la dieta que imita el ayuno o la vitamina C sola reducen el crecimiento de las células cancerosas y provocan un aumento menor en la muerte de las mismas. En cambio, cuando se usan juntas, tienen un efecto dramático, matando casi a todas ellas”, ha señalado Longo.
Cabe destacar que Longo, y el resto del equipo, detectaron este fuerte efecto solo en las células cancerosas que tenían una mutación que se considera uno de los objetivos más desafiantes en la investigación del cáncer. Estas mutaciones en el gen KRAS indican que el cuerpo se resiste a la mayoría de los tratamientos contra el cáncer y reducen la tasa de supervivencia del paciente. Las mutaciones de KRAS ocurren en aproximadamente una cuarta parte de todos los cánceres humanos y se estima que ocurren en hasta la mitad de todos los cánceres colorrectales.
Eficacia limitada de la vitamina C
El estudio también proporcionó pistas sobre por qué estudios previos de la vitamina C, como posible terapia contra el cáncer, mostraron una eficacia limitada.
Los autores insisten en que un tratamiento con vitamina C, por sí solo, parece activar las células mutadas en KRAS para proteger las células cancerosas al aumentar los niveles de ferritina, una proteína que se une al hierro. Cabe añadir que, al reducir los niveles de ferritina, se puede aumentar la toxicidad de la vitamina C.
En medio de este hallazgo, los científicos también descubrieron que los pacientes con cáncer colorrectal con altos niveles de la proteína de unión al hierro tienen menos posibilidades de supervivencia. Respecto al último ensayo, “observamos cómo los ciclos de dieta que imitan el ayuno pueden aumentar el efecto de las dosis farmacológicas de vitamina C contra los cánceres con mutación de KRAS”, dijo Maira Di Tano, coautora del estudio.
La coautora ha añadido que esto ocurre a través de la regulación de los niveles de hierro y de los mecanismos moleculares involucrados en el estrés oxidativo. “Los resultados apuntan particularmente a un gen que regula los niveles de hierro: la hemo-oxigenasa-1”, ha confirmado Di Tano.
Conclusiones sobre el ayuno y el cáncer
En definitiva, los científicos creen que el cáncer eventualmente se tratará con medicamentos de baja toxicidad de una manera similar a como se usan los antibióticos para tratar infecciones que matan bacterias particulares. Sin embargo, estas podrían ser sustituidas por otros medicamentos en caso de que el primero no sea efectivo.
Para avanzar hacia ese objetivo, los investigadores hacen hincapié en dos hipótesis que se deberían probar. La primera de ellas apunta que sus intervenciones combinadas no tóxicas deberían funcionar en ratones. Para después, poder comenzar con unos prometedores ensayos clínicos en humanos. Este nuevo estudio ha podido ser el primer paso para alcanzar el objetivo final.
Referencias
Di Tano M, Raucci F, Vernieri C, Caffa I, Buono R, Fanti M, Brandhorst S, Curigliano G, Nencioni A, de Braud F, Longo VD. Synergistic effect of fasting-mimicking diet and vitamin C against KRAS mutated cancers. Nat Commun. 2020 May 11;11(1):2332.
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