En nuestro día a día no solemos pararnos a analizar qué pensamientos tenemos en la cabeza, introducirnos en ellos para verlos desde dentro y menos todavía darnos cuenta lo que estos pensamientos generan en nuestra vida.
De toda la cantidad de pensamientos que tenemos, hay un conjunto de ellos que hacen que nos baje la autoestima, sintiéndonos inútiles y que lo pasemos mal al no vernos capaces de nada y menos de cambiar.
De estos pensamientos hemos elegido siete que quizás sean de los que más tenemos en nuestra cabeza durante más tiempo y que determinan el resto de nuestros pensamientos, sentimientos y acciones.
Pensamientos que bajan la autoestima
1. He nacido así
Muchas veces nos agarramos a argumentos basados en las características innatas con las que nacemos que nos hacen quedarnos paralizados, sin darnos cuenta de todo el potencial con el que verdaderamente hemos nacido. Dejar de justificarse con la típica frase «soy así» nos ayudará a mejorar los niveles de autoestima.
Hoy, gracias a la epigenética ya se está demostrando científicamente que nuestras experiencias modifican nuestros genes y por tanto se nos rompe la limitación de este pensamiento.
2. Es que mis padres conmigo fueron…
Doctrinas y teorías varias han alimentado desde siempre la creencia de la determinación de nuestra educación en la infancia que nos hacen dudar de nuestra capacidad actual para conseguir nuestros sueños.
Podemos admitir la influencia en nuestro presente de los acontecimientos del pasado, es obvio que dejan huella, pero la determinación cerrada a cal y canto es una interpretación y como tal, relativizante.
3. A mi edad
Uno de los pensamientos que más nos limita es el considerar que tenemos ya una edad que nos incapacita para aquello que deseamos. No hace falta ser mayor para tener este tipo de limitación. Cualquier edad es válida para tener este tipo de pensamientos saboteadores.
La edad es más psicológica que física, aunque nos agarremos a esta última para quedarnos estancados e incapacitados.
4. Si no fuera por el dinero
Otro de los pensamientos que más nos limitan y nos hacen sentirnos inválidos es hacer depender nuestra felicidad del dinero. Creemos que si tuviéramos más dinero del que tenemos podríamos conseguir aquello que queremos y en consecuencia ser más felices y sentirnos mejor.
La voluntad es una decisión personal no material y primer paso de todo sueño alcanzado.
5. La culpa la tienen los políticos
Aunque pueda parecer un tema actual, el culpabilizar a los políticos y poderosos de nuestra incapacidad es algo que desde siempre ha existido. Desde siempre, tanto en otras culturas como en otros tiempos, se ha buscado culpar a los gobernantes.
Viktor Frankl nos recordó la importancia y validez de nuestra capacidad de elegir, y por tanto de ser libre para no dejarse arrebatar la autoestima.



6. Lo intento
El personaje de La Guerra De Las Galaxias, Yoda, expresa muy bien lo que oculta la expresión “lo intentaré”: “No, no lo intentes. Hazlo, o no lo hagas. Pero no lo intentes”. Es decir, cuando decimos que lo intentaremos normalmente es que no lo haremos.
Al final es una cuestión de hacer y no de intentar, puesto que así aprenderemos y nos empoderaremos. La sola expresión intentar lleva implícita la duda.
7. Nadie me quiere
Una idea muy habitual en la adolescencia es pensar que nadie nos quiere, algo que solemos extender a la edad adulta si no lo trabajamos. La salida a esta limitación es darnos cuenta que el primero que no nos quiere es nosotros mismos.
A partir de ahí, si actuamos romperemos con estos pensamientos limitantes y nuestra autoestima aumentará y nos sentiremos felices.
Carlos Postigo
Índice de contenidos